Todo comenzó con la fabricación de cal. Un comienzo modesto, que muy pronto creció hasta alcanzar una producción que superaba las sesenta mil toneladas anuales. Nuestros cementos aparecieron en el mercado argentino en la década del cuarenta. Poco después le siguieron el cemento de albañilería, los pegamentos y los hormigones.
En los ochenta fusionamos nuestra historia con la de dos de las empresas más importantes del mundo en nuestro rubro, dando lugar a la entrada de capitales extranjeros en la sociedad.
Las certificaciones ISO9001 en los procesos de elaboración nos posicionaron en un lugar de liderazgo indiscutible. Son muchos años y están llenos de logros y números. Pero nuestro verdadero legado está en las paredes, los techos, las casas y las carreteras. Está en la construcción de nuestro país. Y nada nos puede causar más orgullo que eso.
Sociedad Anónima Calera Avellaneda inicia sus actividades en el año 1919 tomando el nombre de la ciudad porteña en la que levanta su primera fábrica; con un capital inicial de 300.000.- pesos, su producción se alimenta con la materia prima extraída de las canteras arrendadas en San Jacinto, Olavarría.
Desde estas instalaciones lanza al mercado Cal Hidrat y un año después, alentada por la creciente demanda de este exitoso producto, adquiere las mencionadas canteras.
La Sociedad crece al ritmo de un país en permanente construcción y hacia 1928 logra elevar su capital social a 3.000.000.- pesos
El éxito impulsa modificaciones en la estructura de la Empresa que decide centralizar sus procesos de fabricación en Olavarría y diversificar su oferta, logrando que en diciembre de 1933 se autorice la instalación de una fábrica de Cemento Portland en la cantera.
Hacia 1934, su capacidad de producción anual la convierten en la mayor fábrica de cal de Sudamérica. En febrero de 1937, tras el decreto de aprobación del cemento Avellaneda, la Sociedad inicia la producción de este producto con una capacidad inicial de 60.000.- tn/año.
En una época signada por la expansión edilicia de un país en permanente construcción, la calidad de los productos Avellaneda es elegida por arquitectos e ingenieros para sustentar sus proyectos y transformarlos en las obras que hoy conforman el perfil de nuestras ciudades y pueblos formando parte del acervo cultural argentino.
En 1958 se pone en marcha el horno Nro. 2 Humboldt, primer horno del país con intercambiador de calor y uno de los primeros del mundo de este tipo. Operando Conjuntamente con el horno Nro.1 Lepol, en funcionamiento desde 1939, aumenta la capacidad de producción de cemento llegando a las 200.000 t/año al finalizar esta década.
En 1962 se instalan máquinas hidratadoras automáticas en la fábrica de cal de Olavarría y en 1968 se pone en marcha el horno Nro.7 alcanzando de esta manera una capacidad de despacho de cal Hidrat superior a las 200.000 t/año.
También en la fábrica de Olavarría se instala en 1964, un molino vertical de crudo a la vez que se realizan diversas mejoras y optimizaciones en los hornos 1 y 2 posibilitando un aumento en la capacidad de despacho de cemento a 280.000 t/año.
Afianzada en el mercado, la Empresa lanza en 1965 el Cemento Portland Avellaneda Extra.
A principios de los años setenta se inician las obras de ampliación y remodelación de la fábrica en Olavarría llegando a 350.000 tns. de cemento año. Al mismo tiempo la Empresa pone en marcha el proyecto de fabricación y comercialización de Cemento ARS y Cemento de Albañilería HIDRALIT con el objetivo de lograr un espacio aún más competitivo en el mercado de la construcción.
Los logros obtenidos llaman la atención de la empresa Ciments Molins / Uniland que en 1980 la incorporan al grupo español. Ese mismo año la capacidad de producción anual se incrementa a 1.100.000 tn.
En 1980 se crea la División de Ingeniería Eléctrica con el fin de disponer de un centro local de desarrollo para incrementar la automatización de los procesos y sistemas de control.
Ante la creciente aceptación de los nuevos productos, la Empresa decide ampliar aún más su gama con el lanzamiento de un adhesivo. Pegamento PERFECTO sale al mercado en 1986.
En 1989, la fábrica El Gigante de San Luis, incorpora su producción inicial de 160.000 tn. anuales al grupo cementero. Ese mismo año la firma cambia su razón societaria por la de CEMENTOS AVELLANEDA S.A.
En 1993 Cementos Avellaneda incorpora a sus procesos de producción la molienda y el palletizado de cal HIDRAT. Un año mas tarde lanza al mercado su Cemento Petrolero y en 1997 comienza a elaborar su Cemento Fillerizado.
Por otra parte, en 1994 se amplía, automatiza y centraliza la planta de San Luis, pasando de vía húmeda a vía seca. Continuando con su plan de diversificación en 1999 crea la División HORMIGONES AVELLANEDA.
El fin del milenio llega con las palletizadoras de cemento de alta tecnología que permiten el enfundado automático de las bolsas, la protección de las mismas y la aceleración en el despacho.
En el 2004 la Empresa finaliza las obras de ampliación y modernización de la fábrica en Olavarría lo cual le permite aumentar su capacidad de producción a 2.380.000 toneladas de cemento anuales. Por otra parte, en su planta de San Luis, pone en marcha un innovador emprendimiento destinado a la sustitución de combustibles fósiles por cáscaras de maní. En el 2008, aplicando una importante variación en los procesos de fabricación de la cal, lanza al mercado Cal Hidrat Extra, un novedoso producto no sólo por sus características intrínsecas, sino también por la metodología utilizada en su proceso de fabricación. El proyecto, registrado ante United Nations Framework Convention on Climate Change (UNFCCC), tiene una gran implicancia ambiental.
En 2009 la empresa brasileña Votorantim Cimentos se convierte en accionista sustituyendo a Cementos Pórtland Valderrivas y suscribiendo un acuerdo de colaboración empresaria con Cementos Molins. Ese mismo año, con la inauguración de la Z.A.L., “Zona de Actividades Logísticas” en Villa Mercedes provincia de San Luis, propicia la apertura de su primer centro de distribución polimodal que, por su situación estratégica y facilidades logísticas le permite una ampliación de su oferta a nuevos mercados. Además, en este emplazamiento, la Empresa promueve la realización de pruebas tendientes a demostrar las excelentes cualidades de los bitrenes.
En 2010, la Firma pone en funcionamiento un nuevo molino de cemento de tipo vertical de rodillos en su Planta Olavarría. El Molino 11, diseñado en concordancia con el compromiso de desarrollo sustentable que mantiene la Organización permite hasta un 40% de ahorro de energía. Ese mismo año inaugura CACHO, “Centro de Atención al Chofer” en Planta Olavarría; el establecimiento, único en la zona, pone a disposición del chofer modernas instalaciones que le brindan un espacio de descanso confortable y acogedor.
Durante 2011 y continuando con su política innovadora, la Firma presenta al mercado tres nuevos productos, “Cemento Pórtland Compuesto”, “Cal Hidrat Vial” y “Pegamento Perfecto Porcellanato”.
En noviembre del mismo año, inaugura la ampliación del Horno 3, con el consiguiente incremento de su capacidad en un 75% y de la producción de cemento en un 25%. En 2012 comienza a comercializar “Pegamento Perfecto Flexible” completando de esta manera la línea de adhesivos de la Compañía.
En mayo de 2013, Cementos Avellaneda pone en marcha el primer bitren en el país, con aprobación para circular en todas las rutas y autopistas de la provincia de San Luis.
Cementos Avellaneda cumple 100 años de historia. De La calera de los años 20 con canteras arrendadas, la compañía se transforma en una planta de última generación que produce 350.000 tn de cal por año. Pero no solamente ha crecido la cementera; sus valores los conducen por el camino de la sustentabilidad, la seriedad y el respeto. En el curso de los años se implementaron diversos proyectos; tecnológicos, logísticos, en servicios, comunitarios, y de responsabilidad social empresaria con foco en la calidad de vida de los más necesitados.
Este es sólo el comienzo de la historia de Cementos Avellaneda. Una historia que continúa escribiéndose, transitando pasos firmes y sustentables.
Construyendo cimientos, cimientos que dejan huella…